La igualdad en las competencias

Si bien es cierto que existen diferencias de conocimientos sobre la práctica colombófila, no es menos cierto que existen diferencias en el potencial competitivo y no me refiero precisamente a la calidad sino a la cantidad de ejemplares con que se disputan los campeonatos, este fenómeno se dá entre los fuertes competidores con grandes contingentes de palomas con respecto a reducidos lotes que poseen la gran mayoría de los aficionados activos, si a estas diferencias le asociamos la falta de recursos o tiempo disponible evidentemente se marca un notable contraste muy perceptible por cierto que promueve un debilitamiento fenomenal en buena parte de los aficionados sobretodo en los principiantes y en aquellos que carecen de experiencia y poca capacitación, y es justamente ahí donde se acentúa brutalmente el atraso de la práctica en este deporte, estas limitaciones depositan un entendimiento conceptualmente pobre en la actividad colombófila que ha provocado el desánimo y ha diluído la esperanza de muchísimos aficionados que emigraron y se refugieron en otras prácticas deportivas por aficción al pasatiempo o al entretenimiento,

Inscribamos en el mundo de la práctica colombófila, una venerable enseñanza filosófica a modo de reflexión de Anaxágoras, griego remoto, autor de doctrinas y filósofo eminente, que nos dice, que el todo es más que la suma de las partes y ninguna de esa partes sin embargo, cuenta con la riqueza incomparable de todo el conjunto, este ejemplo filosófico que de ser aplicado en la práctica de nuestro medio, privilegia la categorización del triunfo, de manera que, si aficionados con falta de recursos y tiempo disponible son negados en términos de equidad e igualdad, si solo existen como apéndices en la medida que sirven a los más fuertes, no hay posibilidad de competir con valores reales y por lo tanto se desvirtua toda competencia, en el historial de la práctica colombófila centenares de jovenes aficionados han llegado a este deporte con un entusiasmo digno de admirar y con el pasar del tiempo han decaído en su adhesión y justamente se dió en casos que por falta de conocimientos e ignorar cuales son los principios básicos de las verdaderas reglas de juego en los concursos sociales, no encontraron el camino conducente para adoptar un método compatible a sus ansias de triunfar, hasta llegar al extremo de el abandono total de la actividad por creer en el descrédito de su propia aptitud de colombófilo y como consecuencia la finitud de su práctica deportiva.-

Por estas mismas diferencias de las concepciones de unos y de otros, me he propuesto reiterar y no tiene otro propósito más que el objetivo de insistir con una serie de interpretaciones y conocimientos adquiridos, destinado a incentivar al novel aficionado para que dentro de sus posibilidades tome parte activa en las carreras y les permita competir en condiciones de igualdad con el resto de los competidores, es mi deseo y porque así me lo he propuesto, alcanzar elementos a los que considero valederos en defensa de los nuevos e inexpertos y exponer algunos conceptos derivados de un conjunto de valores elementales aprendidos básicamente por haber acumulado experiencias que me permiten expresar conocimientos, ideas y creencias, en un medio cultural como es el colombófilo.-

Seguramente todo este conjunto de palabras encierran temas poco atractivos, pero a decir verdad son indispensables para lograr el propósito de orientar con la necesaria amplitud que requiere la mejor ilustración del aficionado inexperto, amparado en la certeza del viejo aforismo que dice, que el saber no ocupa lugar, es muy oportuno recordarlo, porque no es posible suponer a un aficionado recien iniciado que ignore cuales son los elementos básicos para competir honrosamente.-

Es lógico y natural que todo colombófilo por más nuevo que sea, trate de enriquecer su archivo de conocimientos, que de ser así, debe aplicarlo cautelosamente cuando son novedad, pero sin exagerado entusiasmo y sin destruir jamás la base del sistema que adoptó, el éxito en colombofilia, depende mucho más del trabajo del colombófilo, de su obra y de su observacion particular, que el conocimiento de las reglas que sirven exclusivamente para enseñar el A B C de la colombofilia, de manera que, es al aficionado quien debe poner en práctica su método, sin perder de vista el sano propósito que lo guía al abrazar la causa de este apasionante deporte.-

No es mi intención con este contenido crear divisiones, sino persuadir y hasta conmover si fuera necesario a los colombófilos y nóveles sin experiencia para que no decaigan en su intento de lograr el triunfo, porque se puede correr de igual a igual, obviamente de otra manera, en otras circunstancias donde las reglas de juego sean parejas para todos, con este criterio se puede llegar al éxito en la modalidad de competencias especiales, para ello deben tener presente que la búsqueda del sistema a emplear es un problema individual y varia hasta el infinito y es al colombófilo quien le corresponda descubrir el método más adecuado a sus exigencias.-

Con imaginación que es una poderosa actividad creadora, seguramente les vá a permitir muchas veces anticipar o reemplazar el conocimiento, este es un elemento importante que vale para todos porque les permitirá vislumbrar posibilidades diferentes para perfeccionar cualquier método ajustándolo a las necesidades de cada uno, sin cambiar estrategias sino cambiando criterios que implique una transformación sustantiva a las distintas variantes posibles que puedan acceder, de manera que guiándose por estas conclusiones podrán apreciar que no existe una regla o norma que distinga cual es el sistema que lleve a una paloma de carrera a su máximo rendimiento.-

Si, deben estar totalmente convencidos que una de estas bondades deportivas estan condicionadas exclusivamente a los valores individuales de cada paloma que varian de uno a otro ejemplar aún dentro de una misma línea de cultivo, sin embrago aún así sería insuficiente llegar al éxito, porque las condiciones fundamentales para triunfar en la práctica de este deporte cualquiera sea el sistema a emplear por el aficionado, son imprescindibles la existencia simultánea de factores como, además de la calidad y cualidad de los ejemplares a utilizar, el estado resplandeciente de la paloma en el momento de la competencia, la habilidad y pericia en el manejo del plantel volador, una forma acertada de alimentar y entrenar, más el estado sanitario impecable del palomar.-

De manera que poniendo énfasis, atención y esmero en el cuidado y preparación de las palomas, los palomares de dimensiones reducidas en el cual puedan alojar no más de una treintena de ejemplares excelentemente seleccionados y convenientemente preparados son elementos suficientes para encontrar el camino que los lleve a un sistema en el cual han de especializarse y competir en carreras especiales con muchas posibilidades de triunfo, que seguramente a la hora de hacer un balance final de cada temporada estarán en condiciones ventajosas en cuanto a la proporción de dinero gastado y ganado, que económicamente y en última instáncia es lo verdaderamenmte importante para los aficionados de bajos recursos con sentido práctico en este deporte.-

Antonio Bernárdez Soc.Col. Vicente Lopez Florida—Buenos Aires

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